Más de 55 millones de europeos registrados atravesaron hacia nuevos destino entre 1820 y 1924, una de las causas fundamentales por las cuales se produce este movimiento migratorio son las distintas transformaciones que afectaron la economía europea y mundial desde mediados del siglo XVIII.
No habiendo registros anteriores del siglo XIX se recurre como fuente a las estadísticas poblacionales comparadas con el nacimiento y defunciones que van produciéndose en el periodo, también se utilizan los pedidos de pasaporte y permisos de embarque efectuados en los puertos principales de Europa.
Para el periodo comprendido entre 1857- 1914, la Argentina recibió 4,6 millones, en el censo de 1914 la población extranjera era del 30 %, siendo el año 1913 el de mayor recepción de personas 300.000.
Visión atracción/expulsión: La expansión de las economías centrales es la que genera una fuente demanda de mano de obra de los países periféricos. Aves de paso que se incorporan en un mercado de trabajo segmentado que les impide asentarse y progresar con rapidez. La idea de maximizar los ingresos, hombres móviles que buscan oportunidades laborales emigrando a zonas que ofrezcan un salario mayor al que le ofrecen en su país y alguno cercano.
Historia
Anteriormente al siglo XIX cerca de 100.000 persona ingresaron al país entre 1701 y 1800, originarios de Andalucía y el país Vasco, estos procesos migratorios son en cadena (enlaces étnicos que llaman a sus coterráneos), en una proporción de 610 hombres por cada 100 mujeres, generalmente hombres jóvenes solteros, la mayoría de ello se dedican a tareas vinculadas al comercio, pulperías, artesanos, militares, clérigos, burócratas.
La migración tardo colonial comienza un proceso de retroceso a partir de la guerra de Independencia, la persecución sobre los ciudadanos españoles que no apoyan la causa de la guerra de independencia favorece el retorno de una gran cantidad de españoles a la península ibérica.
Ya la 1ra Junta (1810) establece políticas de inmigración, permitiendo que todos los extranjeros que no estaban en guerra con nosotros pudiéndose establecer en nuestro territorio donde gozaría los derechos del ciudadano.
Durante este periodo comprendido entre 1808 y 1820 favoreció el desembarco en el territorio de nuevas corrientes de migrantes provenientes de Gran Bretaña, Estados Unidos y Francia que se establecen desarrollando tares vinculadas al comercio naviero, el desarrollo artesanal y la hojalatería. Estos grupos comienzan agruparse en sociedades comerciales con residencia fija
Ya en 1822 como causante de las políticas contra España la cantidad de extranjeros era el 4 % cuando en 1810 era del 22 %.
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